La compañía ha comunicado que no dejarán asientos del medio vacíos y buscarán nuevas medidas de seguridad y distanciamiento para evitar la propagación del virus para cuando se reactiven las operaciones. Sin embargo, no han llegado a establecer como obligatorio el uso de mascarillas o guantes.

La decisión ha sido anunciada después de que la aerolínea tuviera que despedir a 12.000 empleados, incluyendo pilotos y tripulantes de cabina de pasajeros. El objetivo, según Willie Walsh, CEO del IAG, es volver al servicio en su mayoría en julio de 2020, en función de las restricciones de viaje.

La compañía ha comunicado que no impedirá la reserva de los asientos intermedios, alegando la dificultad de mantener la distancia social en un avión, a diferencia de compañías como Lufthansa y EasyJet que sí están dispuestos a sacrificar la fila del medio. British Airways plantea un escenario donde haya un regreso normal al servicio y todos los asientos estén a la venta. El uso de mascarillas no será tampoco obligatorio pero sí es altamente recomendable, según la aerolínea.

British Airways ha estado ofreciendo sus servicios durante la pandemia, principalmente para vuelos de repatriación. Prácticamente suspendió el 95% de sus vuelos.

El primer ministro británico Boris Johnson ha comunicado que el bloqueo podría disminuir la próxima semana. Sin embargo, esto no significa que todavía estén en vacaciones en el extranjero.

Algunos medios británicos han señalado que es probable que Reino Unido quede fuera de la lista cuando se trata de dar la bienvenida a los turistas debido a que alcanzaron las cifras de mortalidad por coronavirus más alta de Europa, con casi 32.000 fallecidos.